Ahora sí que no hay ningún dato positivo para el sector de la vivienda.
Ni el número de viviendas iniciadas, ni las viviendas hipotecadas, mucho menos de las operaciones de compraventa de casas, presentan números positivos.
Literalmente, podría decir que el sector de la vivienda está en el hoyo. Es que no hay más, es lo que hay.
En números, las viviendas iniciadas cayeron un 43,4%, el número de hipotecas cayó un 28,65% y el de la compraventa de viviendas ha disminuido un 26,3%, todos respecto a julio del año anterior.
Finalmente, esto ratifica la previsión de muchos. El sector está casi parado.
Las empresas dedicadas a cualquier sector de la construcción están despidiendo a sus empleados, la mercancía no se vende, está apilada en sus almacenes. El ambiente es tenso en las oficinas de estas empresas, los empleados que quedan esperan lo peor y la desesperanza domina.
Es una imagen desoladora, queda la nostalgia del boom inmobiliario, cuando todos querían y podían comprar una vivienda, cuando las hipotecas se otorgaban al por mayor, cuando los bancos prácticamente regalaban creditos.
Esto es el 2008, no quiero ni pensar la situación para el 2009. Este septiembre sí que se merece el nombre de septiembre negro.
Y es que las constructoras y promotoras no ven la salida, puede ser que tengan un respiro por la refinanciación que el Instituto de Crédito Oficial les otorgue, pero la pregunta es ¿cuánto tiempo los mantendrá a flote? Tal vez no mucho.
No queda más que esperar a que el momento de incertidumbre pase.
viernes, 26 de septiembre de 2008
El sector de la vivienda está en el hoyo
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