Lejos quedan ya los meses en los que rozábamos la deflación con un prácticamente nulo crecimiento de los precios.
Durante este mes de Octubre, el Índice de Precios al Consumo (IPC) elaborado por el Instituto Nacional de Estadística (INE) se ha situado en el 2,3%, lo que supone un aumento de dos décimas en tasa interanual.
Tenemos que tener en cuenta que este repunte supone una décima porcentual por encima de lo que a priori se esperaba, y si miramos la tasa intermensual ha ascendido 9 décimas con respecto al mes de Septiembre de 2010.
Si miramos en el cambio producido este mes con respecto al anterior, el grupo Vestido y calzado es el que más culpa de esta subida tiene, con una tasa intermensual del 9,8%. También el subgrupo Vivienda, con una tasa del 1,4% debido principalmente a la subida del precio de la luz.
Pero que sean los que más hayan subido no quiere decir que sean los que más hayan contribuido, de hecho el rubro Vivienda tiene un infinito mayor peso que Vestido y Calzado, explicando el 0,136 de los 0,2 puntos que ha subido este indicador frente a los 0,007 puntos que explica Vestido y Calzado. Esto es debido, principalmente, a la ponderación que tienen.
En términos interanuales, el precio de los combustibles es lo que más ha propiciado esta subida del 2,3%, que afecta no sólo a conductores, sino al encarecimiento de la mayoría de productos, a través del transporte.
El análisis del IPC tiene múltiples lecturas y muchos factores que influyen, pero que salga fuera de la conciencia que los precios están bajando cuando no lo están haciendo.
Y ahora… ¿Qué ocurrirá con los sueldos y salarios? ¿Perderemos de nuevo poder adquisitivo? Veremos.
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