Al igual que hablamos de hipotecas bonificadas, también existen depósitos bancarios bonificados.
Pero, ¿a qué nos referimos exactamente como depósito bonificado? Los depósitos bonificados son aquellos que tienen un tipo de interés base muy bajo y que exigen de vinculación para que el tipo de interés aumente.
Lo que nos suelen pedir es la domiciliación de la nómina, de la pensión o ingresos periódicos, tarjeta de crédito, tarjeta de débito, recibos e incluso planes de pensiones. ¿Merece la pena vincularse con todo esto? La respuesta es claramente no, por dos motivos:
- El primero de ellos es que este tipo de depósitos, si os dais cuenta, no ofrecen una rentabilidad superior a otras ofertas que no exigen vinculación, con lo que debemos escoger en todo caso las primeras.
- Por otro lado, también es importante valorar el coste que nos va a suponer, es decir, al tipo de interés que nos ofrecen con la vinculación tenemos que restarle las comisiones de las tarjetas o los regalos que no recibiremos por tener la nómina en esta entidad y no en otra donde nos ofrecen algo a cambio.
En definitiva, siempre es mejor, en todo caso, contratar un depósito bancario a tipo fijo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario