Un buen objetivo a corto plazo es el 4%. Existen varios depósitos que consiguen mantener el dinero rondando esta cifra y podemos mantener nuestro dinero más de un año por encima del 4% sólo contratando, por ejemplo, el depósito a 1 año de Sa Nostra.
Conseguir mantener una rentabilidad por encima del 5% puede ser realmente complicado.
También con anterioridad deberemos plantearnos cuán importante es para nosotros la disponibilidad de nuestro dinero. Depósitos bancarios con elevadas comisiones por cancelación anticipada pueden hacer, en caso de necesitar nuestro dinero, que nuestra rentabilidad tienda a cero.
El plazo es otro de los principales aspectos a la hora de contratar un depósito y la disyuntiva entre invertir a corto o a largo plazo se ha instalado en la mente de algunos. Este tema lo analizaremos más adelante con mayor profundidad, pero el plazo al que deseamos invertir es muy importante. Debemos decidir entre un depósito del cual no deberemos disponer de su capital en uno o dos años o hacerlo sólo a 6 meses, según cuales sean las diferencias.
La rentabilidad-plazo traza una línea descendente, a menor plazo mayor interés (pues los intereses generados son menores), y viceversa. Sin embargo existen algunos depósitos que premiando el largo plazo de 3 o 4 años que se va a contratar, elevan su rentabilidad hasta zonas de corto (por ejemplo Depósitos Premium Top de Banco Caixa Geral). Suelen acompañarse de elevada comisión por cancelación anticipada para asegurar su estancia ahí por tan largo periodo de tiempo.
Otras consideraciones que debemos tener en cuenta es la liquidación de intereses. Un motivo por el que debemos tenerlo en cuenta es por cuestiones fiscales, pues el devengo de intereses tributa a hacienda y nos puede hacer variar nuestra declaración de la renta si nos estamos moviendo en aguas pantanosas. Otro motivo por el que interesa fijarse en este aspecto es mucho más económico, pues la liquidación anticipada o al menos periódica en depósitos a largo plazo es más interesante que al vencimiento por cuestiones lógicas. Cuando invertimos a corto plazo nos puede interesar más o menos esto, pero en el largo plazo hay que tenerlo en cuenta pues no dispondremos ni de nuestro capital ni de los intereses.
La fácil comprensibilidad de los depósitos es también importante. Depósitos difícilmente comprensibles o que no dispongan de todas sus condiciones claras no son recomendables. Ya incluso en la publicidad del depósito si vemos que no disponen de los aspectos mencionados más arriba, en especial de la comisión por cancelación anticipada, podemos temernos lo peor.
Otros aspectos como la vinculación (que también merece tema aparte), los gastos y las comisiones también deberemos tenerlas en cuenta pues son importantes a la hora de decidirnos llevar nuestro dinero a una entidad u a otra.