Las altas comisiones y la fidelización que el uso de este plástico conlleva para el cliente con la entidad, ha llevado a muchos bancos y cajas a lanzar importantes promociones para su uso.
El uso de las tarjetas de crédito conlleva la necesidad de fondos en una cuenta asociada, o en ausencia de ellos, la disposición de estos fondos a crédito. Esto supone un importante negocio para las entidades, pues el cliente ni siquiera debe desplazarse hasta la entidad para disponer de él, lo hará automáticamente.
Es por esto por lo que no existe caja que no disponga de promociones, descuentos, sorteos, regalos… todo está bien si es para fomentar su uso o aumentar las nuevas contrataciones.
A nivel del consumidor de a pie, lo que mejor nos viene sin ninguna duda son los descuentos. Campañas como la promoción de descuentos de Euro 6000 o cualquier otra proveniente de cualquier banco o caja, nos hacen la vida más fácil.
¿Ejemplos? Bueno, la promoción de La Caja de Canarias con un 5% de descuento en restaurantes, bares, cafeterías, hoteles…, Caixa Sabadell, Caja Rioja…
Los sorteos también están de moda, por ejemplo Caja Granada ha lanzado una promoción llamada “Mueve tus tarjetas” en la que podremos ganar compras de hasta 150 euros al día y 300 euros a la semana.
El uso de las tarjetas de crédito no tiene por qué ser malo, el problema está, como en todo, cuando se abusa de ello.
Un crédito se debe usar como último recurso, cuando necesitamos algo (nótese el concepto de necesidad) y tenemos que comprarlo mediante un crédito. Los intereses de estas tarjetas suelen ser elevados y la espiral de consumo a crédito nos puede provocar problemas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario